LA LUZ QUE HAY EN TI

Mira quien eres en realidad, esto no lo puedes ver con los ojos del cuerpo, ya que no eres el cuerpo, solo el silencio te puede revelar lo que eres en realidad.

Pasamos nuestra vida enredados con el exterior, con las cosas del ego, con todo lo medible y visible, y la insatisfacción parece perseguirnos consigamos lo que consigamos.

Esta en tu interior, eres tu y es el TODO, unido y fluyendo, viviéndose la vida a través de ti, comprendiendo, aceptando y amando con la apertura del que ha perdido el miedo porque ha salido del ego y trabaja desde el Amor, ha parado su mente y ha conectado con la energía del corazón, a dejado de darse razones y en el silencio se ha vivenciado.

No se puede explicar, se tiene que paladear, no necesitas tener fe en ello, pero si darle espacio, silencio y escucha para sentirlo.

Brilla tanto que deslumbra, llena tanto que rebosa, y aunque no te lo sientas en este momento, no por ello dejas de ser tú, y aunque no lo creas no por ello dejas de ser tú, y aunque no lo reconozcas la luz no se apaga en ti, porque lo eres.

Podrás cubrirlo con mil sombras que dificultara verlo, a ti y a los demás, pero debajo de ellas sigue estando la luz que brilla en ti, y el día que la vivencies no querrás otra cosa. Y trabajaras para llevar tus sombras a la luz y que tu brillo como un imán haga resplandecer el brillo que hay en los demás.

Nuestro trabajo es reconocer esta luz-amor-consciencia que somos, y el único camino para encontrarla es deshacer, deshacer las capas, los muros, los velos formados por las sombras que nos impiden ver-sentir la realidad. Es un trabajo largo, hay que tener valor para ver aquello que no nos gusta y que esconde tu mayor don. Si tienes miedo al odio que hay en ti descubrirás que tienes tanta capacidad de amar como de odiar, pero mientras quieras dejar al odio, o cualquier otra parte de ti fuera, no podrás vivir de forma completa quien eres, habrá algo que quedara agazapado en la sombra, provocando miedo, molestándote, algo que no te dejara ser tu misma y te hará andar con pies de plomo, porque hay algo en ti que no has querido reconocer, lo temes, lo escondes, intentas que los demás no lo vean, porque crees que te hace indigno, crees que cuando lo sepan te rechazaran, te sientes como un monstruo. Pero se trata de una visión de la dualidad en la que vivimos y que para vivir sin miedo y de forma completa tienes que sacar a la luz, para que en el momento que vea la luz abandone la dualidad, no sea bien ni mal, porque al reconocer que existen los dos lados, al momento reconoces que no existe ninguno, que era una ilusión que formas en tu mente al convertir tus percepciones erróneas en creencias erróneas y vivir y percibir en base a estas.

Dedicado a la luz que lee esto en estos momentos.

Fuente: http://rakukeireiki.ning.com